2. Pasividad Aliada

Cuando los Nazis entran a Austria el 12 de marzo de 1938, el pueblo los recibe con los brazos abiertos 1, y una vez mas los Aliados y Occidente, no hacen nada, probablemente su percepción es que los austriacos querían formar parte de los nazis, por lo que no habrían sido forzados. 

Con Austria bajo el poder alemán, Hitler se aventura y comunica que su deseo es incorporar áreas de Checoslovaquia, dado a que es un país es recursos naturales como el hierro. En septiembre de 1938 el primer ministro británico Neville Chamberlain, viaja en tres ocasiones, y visita a Hitler con el objetivo de disuadirlo en su avance sobre Checoslovaquia. La última vez en que se reúnen, con la participación de Benito Mussolini y Édouard Daladier, en lo que se conoce como la Conferencia de Múnich, acuerdan que Hitler puede anexar la zona germano-parlante pero no intentar invadir el resto del país. A la mañana siguiente Chamberlain firma un tratado de paz entre Alemania y Reino Unido, por lo que es recibido como un héroe. En el papel una guerra ha ido evitada, pero apenas seis meses mas tarde, Hitler invade el resto de Checoslovaquia.